Voy paseando por las mismas calles que hace unos años recorrimos juntos. Y según paseo por ellas, les voy poniendo tus caras, tus poses, tus pasos...
En esta puerta te paraste para explicarme que prefieres hacer fotos de cosas que no salen en las postales, en aquél callejón inmortalizaste a un hombre subido a una bicicleta, en esa esquina te paraste y me mirabas con esos ojos color miel brillando mientras yo te deseaba...
Vuelvo a pasar por los lugares que pateamos juntos y recuerdo tu pelo largo cayéndote por la espalda, tu figura perfecta paseando con esos andares tuyos que tanto me gustan, riéndonos de cada tontería que se nos ocurría...
Hace sol, como aquella vez. Ahora es invierno, en aquel momento era verano. Nos buscábamos en cada esquina, en cada calle, en cada rincón. Cualquier excusa era buena para tocarnos, para hablarnos, para mirarnos, para reírnos...
Y mientras te recuerdo y mientras paseo, vuelvo a sonreírme al imaginar tu cara, tu sonrisa, tus ojos color miel y los hoyuelos de tu cara cuando te ríes, y deseo volver a casa para sentirte otra vez a mi lado...
En esta puerta te paraste para explicarme que prefieres hacer fotos de cosas que no salen en las postales, en aquél callejón inmortalizaste a un hombre subido a una bicicleta, en esa esquina te paraste y me mirabas con esos ojos color miel brillando mientras yo te deseaba...
Vuelvo a pasar por los lugares que pateamos juntos y recuerdo tu pelo largo cayéndote por la espalda, tu figura perfecta paseando con esos andares tuyos que tanto me gustan, riéndonos de cada tontería que se nos ocurría...
Hace sol, como aquella vez. Ahora es invierno, en aquel momento era verano. Nos buscábamos en cada esquina, en cada calle, en cada rincón. Cualquier excusa era buena para tocarnos, para hablarnos, para mirarnos, para reírnos...
Y mientras te recuerdo y mientras paseo, vuelvo a sonreírme al imaginar tu cara, tu sonrisa, tus ojos color miel y los hoyuelos de tu cara cuando te ríes, y deseo volver a casa para sentirte otra vez a mi lado...